miércoles, 25 de septiembre de 2013

IV Madrid-Segovia


Nadie va ha poder hoy con nosotros
    Hoy martes me pongo a escribir esta crónica y no sé cuando la terminare. Son tantas las imágenes que se me vienen a la cabeza que poder colocarlas en un orden cronológico no será tarea fácil. Sé que cuando más tarde me ponga más cosas se quedaran sin “tinta”, a si que al lío.

    La mayoría de los que pasáis a menudo por aquí ya sabréis del final feliz de la aventura gracias al  Facebook o del Twitter y más de uno habrá soltado alguna lagrimita, Sorry.

    Con la entrada anterior, la del lunes quise dar las gracias a los míos para que esta fuese la  Crónica de la Carrera, aunque también durante su transcurso habrá que dar las gracias a algunos personajes secundarios que hicieron más llevadero el camino.

  Te advierto que, si no estás en casa, si estas en el parque con los niños, en la ofi , te tienes que ir a hacer la compra o al dentista, déjalo para más tarde. Tratare de amenizarlo con algunas fotos y no extenderme demasiado pero 102km dan mucho que contar.

 

  El miércoles acudí a por el dorsal, un trámite directo y rápido. El viernes y después de casi 2 años (desde M. Sevilla 2012) que le conocí, volvía a reencontrarme con mi Abuelo, mi Abuelo y mi Abuela Runner. Nos montamos nuestra particular Pasta Party  y pudimos compartir junto a nuestras familias una agradable comida y sobremesa. Gran mujer la Abuela María y fuerte ante las adversidades de la vida.


Familia al completo Papa, Mama, los Niños y los Abuelos
  Ya empezaban las llamadas y los mensajes de ánimos del resto de Blogueros, Thomas, JuanCar, Paco Gacela, Fran, Carlos Prieto…pero que familia tan grande que tengo coño si es que no soy capaz de soltar el teléfono y eso que mi Manuela ya me había mirado dos veces.

 

   Me ahorrare el tema mochilas, ropa, alimentación y demás para recorta (como el gobierno) y me situare directamente tomando café con el Abuelo en Plaza Castilla el sábado. Desde las siete de la mañana ya se recogían las mochilas para los diferentes puntos de avituallamiento y entre corredores y andarines la Plaza cogía ambiente. Mas saludos, Jan, Yolanda, Charli….los @DrinkingRunners….@CarlosAragonza…

Con ella, la Pingüina que me animo
 a esta locura
   


    5, 4,3,2,1…Nos vamosssssss, meses de entreno y cientos de kilómetros  se ponen a prueba y el resultado de todo ello queda aun muy lejos. Ésta aventura se despertó en mi cabeza leyendo la crónica del año pasado de una Pingüina de pasitos cortos pero firmes, y aquí estoy yo hoy para intentar algo que me parecía muy grande en aquella crónica. Para todo el que me conoce sabe a la perfección que no me plantaba sin más en la salida, tenía el entreno en las piernas y un plan súper estructurado de toda la carrera que incluso compartí unos días antes con el Abuelo pero que no hice público para evitar presiones.

    Como muchos ya habréis leído crónicas de esta carrera ya sabréis que son 11 los puntos de control y avituallamientos, 2 de ellos con el material que tú hayas dejado.

Tres Cantos, Colmenar (mochila), Puente Medieval, Manzanares, Matalpino, La Barranca, Cercedilla (mochila), Calzada Romana, La Fuenfria, Cruz de la Gallega y Segovia.

  Siguiendo con los “recortes” no pasare por todas estas etapas puesto que entre alguna la carrera no tuvo mayor transcendencia.

Disponiéndonos de un Madrid muy nublado.


Foto cortesía de Foto runners .Con Jesus
  Desde Plaza Castilla a Colmenar todo fue como la seda, sujetando los caballos que en más de una ocasión se me iban solos, disfrutando con la fresca y nublada mañana (que no duro mucho), los caminos, los amigos, la gente animando y las buenísimas sensaciones, hasta que llego la ya muy leída y temida cuesta del cementerio de Colmenar, hasta búfalos vi mientras la subía (la madre que la pario). FoJoder, menos mal que en el polideportivo me espera aguita fresca y un rico Sándwich de Nocilla. De momento y hasta aquí todos los cartuchos de la canana están llenos y no he dejado de correr, pero a consecuencia de ello  tengo que abandonar a mi compañero que no va tan fino y seguir  mi camino en soledad.

  En solitario empezando a encerrarme y agarrarme a las cuerdas de mi cabeza para olvidarme todo lo posible de kilómetros y de horas, solo quiero correr lo más a gusto posible y que todo fluya, continuar el viaje hacia Manzanares próximo punto importante y que ya nos empieza a meter en la zona dura, dura por los perfiles de continuo rompe piernas y porque esas nubes mañaneras desaparecen totalmente y el sol calienta de huevos. El pelotón ya ha desaparecido y solo quedan dispersos corredores como mucho en grupos de 4 y la mayoría solos, cada uno a lo suyo y encerrado en su mundo con los ojos clavados en el suelo. Entre Manzanares y Matalpino paro en una fuente al lado de la ermita de San Isidro y coincido con los “Manolitas Bikes”, un grupete de chavales que está haciendo la misma ruta que nosotros pero desde Atocha y en MTB  por su cuenta. Ese sería el primero de los muchos encuentros que tuve con ellos durante toda la carrera, risas, agua,  vaselina, más risas, polvo del camino y 6 nuevos amigos de esos que se hacían en la mili (en los momentos jodidos).

Manolitas Bikes
   Ya voy deseando llegar a Matalpino, es el punto kilométrico 50 y tiene un buen avituallamiento, como, bebo, me hago una foto con Sinichi,
Con Sinichi, #yotambientengounafotoconShini
me dejo elogiar por el gentío  y prosigo mi carrera. No quiero parar mucho porque sé que luego es difícil arrancar y mucho menos sentarme. Desde hace ya algunos kilómetros solo llevo una cosa en la cabeza que tira mas de mí que mis propias piernas, se que en la Barranca están mis amigos y sobre todo mi Manuela con mis dos cachorros. No he dejado de correr desde que salí de Madrid a excepción de la cuesta de Colmenar donde me toco esperar a mi compi (que a estas alturas estaría cerca de su retirada), en dos o tres repechos fuertes y en los controles. Voy muy bien y a pesar de llevar 50km, es decir que ya he superado mi record de kilómetros en 8km, puedo correr con cierta comodidad y de momento la única molestia que tengo es que noto algo rozados los muslos y el calor que en esta zona es matador.

  Comienzo a subir hacia el control de la Barranca y todo el mundo camina pero yo estoy ansioso por ver a los míos y aunque a pasitos cortos pero voy corriendo. Al final de un largo y polvoriento camino ya veo a mi princesa que baja corriendo como una pequeña gacela en busca de su papa, la beso y juntos corremos hasta llegar a su hermano que porta una pancarta dándome ánimos, le beso, beso a su madre, los amigos me besan, me suben el ánimo me elogian y me acompañan al control. Subidón total que en el kilómetro 58 sienta de lujo, pero no todo puede ser bueno, cuando reanudo la marcha mi niño se agarra a mí como una lapa y me lo tienen que arrancar literalmente de los brazos. Este es el único momento de la carrera donde dudo si continuar porque me pega un bajón increíble. Poco a poco dejo de oírle llorar, me limpio yo mis lágrimas e intento llevar mi cabeza a cualquier otra cosa que me haga olvidar el mal trago.

Mi gacela acompañándome y mi pitufo con su cartel animando a Papa.
La gran Bea animándonos a todos, que tía mas grande
   Llegar a Cercedilla es el próximo objetivo, control del kilómetro 64 con buen avituallamiento,  mochila para cambiarte de ropa, calcetines, comer, beber, coger el material obligatorio, saludar a mas amig@s y salir para afrontar el peor de los tramos. No me quiero entretener mucho y lo preparo todo en cuchillas sin ni siquiera sentarme, me da pánico el solo hecho de tener luego que ponerme de pie y no poder andar. Con el Sándwich en la mano salgo del polideportivo algo reforzado, seco y expectante ante lo que me viene encima.

   Alto de la Fuenfria, 12km de constante subida con algunas rampas al principio muy duras, con un avituallamiento a la mitad el de la Calzada Romana para poder reponer algo de líquido (poco) y fruta. Aquí ya no hay quien corra, se puede andar o viendo el tiempazo del ganador de la prueba (8h43 que salen los 102km  a 5,8min/km  de media), pues también se puede  subir volando, y aunque mi Manuela diga que soy un Supermán hoy no me he traído la capa y  me toca andar.

   En algún falso llano troto todo lo que puedo pero cuando el camino pica de nuevo continúo andando. Voy completamente solo, no veo a nadie por delante ni a nadie por detrás, como mucho de vez en cuando me cruzo con alguna familia que viene paseando por el camino. Unos me saludan otros preguntan y cuando les cuento de dónde vengo y a dónde voy se echan las manos a la cabeza y me ofrece todo lo que tienen, comida bebida…

   Aquí ya los daños empiezan a ser mayores, las rozaduras de los muslos se acrecientan y ya sabéis lo que es eso, me unto bien de vaselina pero tengo que repetirlo muy a menudo porque el escozor es muy fuerte. La uña del dedo gordo del pie derecho noto que me duele y doy por hecho que tendré que despedirme de ella y luego una  situación cuanto menos “graciosa”. Empiezo a notar como si llevase arena en una zapatilla, paro la sacudo y prosigo pero al momento otra vez, vuelvo a parar y toco el calcetín por si esta la arena dentro pero nada, de nuevo lo mismo lo que pasa que ya noto también algo de escozor y comprendo que es una ampolla que se está formando, jajaja la falta de costumbre y grito “mi primera ampolla Yuhuuu”. Pues con estas taras cada vez va siendo más complicado continuar y a no ser por los ánimos de los Manolita Bike que de nuevo se cruzan con migo después de ponerse hasta el culo de comer en Cercedilla pues el coronar el puerto hubiese sido aun si cabe más duro.

  Alto de la Fuenfria, y después de 80 km los 22 que restan pueden parecer insignificante, que lo parecen, pero cuando comienzas a descender por un camino lleno de piedras, raíces, los muslos apunto de sangrar, la percepción entre el tiempo y la distancia se hace incontrolable y tu cabeza no para de hacer cuentas y no cuadra nada de nada. No llevaba GPS y la falta de control sobre la distancia en esos kilómetros creo que fue uno de los puntos que a nivel Psicológico que más me afecto.

  En una fuente me despido entre buenas risas de mis amigos los Bikers que  estaban allí repostando. Poco a poco llego muy dolorido al último control, el de la Cruz de la Gallega a 11km de meta y aun es de día, uno de mis deseos en los días anteriores era el de intentar llegar a Segovia de de día o como poco cruzar el puerto con luz natural. Lo segundo esta cumplido pero llegar a Segovia lo veo muy difícil, el chico del control me dice que en una hora estoy en meta y me quedo mirándole

- tu cuantos kilómetro has corrido hoy? Si tú crees que después de casi 12horas y 91km me voy a cascar 11km mas en una hora es que no sabes lo que es esto.

   Me despido de ellos y me tiro hacia Segovia intentando correr todo lo posible, pero lo posible es más bien poco, el escozor en los muslos es terrible y tengo que parar de nuevo a darme vaselina. A falta de 7km y a tan solo 4km de entrar en Segovia me pongo el frontal porque después de un buen tropezón y librarme de rodar por el suelo no quiero cagarla y lesionarme. Qué pena, o que error el haber corrido con malla y ropa interior y no sin ella para haberme librado de las escoceduras, porque de verdad os digo, tenía las pierna para correr sin parar. No me gusta ir sin ropa interior pero después de esto….

  Entro en Segovia y tengo una ligera sospecha, en teoría no esperaba que me recibiese nadie y venirme en un autobús de la organización para Madrid pero desde hace unas horas los Whasap de mis amigos y sobre todo de mi Manuela son algo mas fríos e incluso no me manda ninguna fotillo de los peques animándome como sería lo normal, uy, uy, uy… a que se han venido para Segovia sin decir nada.

La espera también es dura
  A falta de poco más de un kilómetro miro hacia atrás para ver quién viene  porque quería entrar solo y de repente a lo lejos veo al Abuelo (desde la Barranca veníamos en 15 o 20min de diferencia), le grito, le espero y hacemos ese kilómetro apretando a muerte o eso me pareció a mi porque íbamos muy deprisa. Entramos juntos? me pregunta Rafa, o prefieres entrar solo?, le cuento mis sospechas y le digo que si no hay nadie entramos de la mano. Pero a falta de 50m para entra a  meta veo en media de la calle a mi Manuela con los niños de la mano esperándome. Jooderr, le doy una palmada al Abuelo y le digo que tire y disfrute de su entrada que detrás voy yo…y si habéis visto el vídeo que subí a Facebook sabréis como termina esto.

Dos cosas, la cara de felicidad de mi niña y -que me decís del peque ? tiene futuro de corredor ehh...

No coment!!
  Lágrimas, besos, sudor, dolor, inocencia, amor, sangre, arena amistad, aplausos, sonrisas y 13h23min para tenerlo todo junto.

La mejor de las recompensas
    Hoy ya miércoles todavía cuando recuerdo esos momentos y veo el vídeo se me saltan las lágrimas. Me marque un tiempo aproximado en el que podría estar y otro en el que me gustaría. El aproximado 14h20 y el que me gustaría antes del anochecer en torno a las 12h30.

  No conseguí llegar de día pero hice una hora menos de lo previsto, y no puedo pedir más, si a esto le añades  que no he tenido ni un solo dolor en las piernas, ni siquiera agujetas pues la satisfacción es mayor. Creo que incluso si no hubiese sido por las escoceduras el tiempo habría sido bastante mejor.

  No quiero decir que repetiré el año que viene porque esta crónica seguro que la lee mi Manuela….pero yo diría que….jajajaja.

   Mi conclusión después de dos días es que me ha parecido menos duro de lo temido.

  Muchas felicidades a todos los que se pusieron en la línea de meta el sábado y sobre todo a los que os conozco que sois muchos. A los que no la terminasteis que también sois unos pocos, todo mi apoyo y mi ánimo, para el año que viene con más fuerza.
  No me gustaría terminar sin felicitar a alguien en particular por su Alucinante carrera, Carlos con quien realice dos entrenos en la zona los días previos y que en su segunda participación a hecho un tiempazo de 11h10 dentro del Top Ten. Felicidades Makina.... y quería que fuese contigo.

  Esta  noche quiero salir un rato porque las heridas ya están curadas y el domingo de nuevo regreso al escenario de la carrera para participar en el Cross de la Pedriza 19km y 2500m de acumulado perteneciente a la Copa de Hierro, y es que a mi no me gusta el BLUES.

   Gracias a todos los que a través del Blog, del Facebook, del Twitter  me habéis  apoyado y animado, en mi vida me he sentido tan arropado, SOIS GENIALES.

ACTIVIDAD COMPLETA AQUÍ
Kilómetros del Martes. 7.13km
Tiempo. 37:40 Min
Ritmo. 5.17 Min/km
CARRERA
Kilómetros del Sábado. 103km
Tiempo. 13:23:12 Min
Ritmo. 7.52 Min /km
Puesto General-101
Puesto Categoría-51
CUENTAKILÓMETROS
Kilómetros semana.  109 Km
Kilómetros año.  2484.30 Km
Kilómetros totales creación del Blog (Agosto 2011). 6242.41 Km
 

 

domingo, 22 de septiembre de 2013

Gracias


    Antes de escribir la crónica de la Madrid–Segovia y que ya advierto será larga  y detallada para poder reflejar lo que ha sido esta aventura, quisiera presentaros a la gente que ha hecho posible que yo cruzase el pasado sábado la meta en Segovia. Estos que veis aquí abajo junto a mí y junto al abuelo son mis amigos más algunos que no pudieron acudir.

   El sábado se empeñaron en que el sueño se cumpliese y desde las 8:30 de la mañana el teléfono no paro de sonar, el grupo de Whasapp creado para la ocasión no dejaba de sonar con mensajes de ánimo. 13h23min sin dejar de empujar, de animar, de hacerme sentir el hombre más fuerte del mundo. Colmenar, Manzanares, La Barranca, Cercedilla…los pase acompañado de ellos, cada vez que las fuerzas faltaban sacaba el teléfono y era como el mejor de los geles energéticos. 103km no son nada con los más de 400 mensajes recibidos durante la carrera, yo les decía por donde iba y ellos se volcaban en animar. Su esfuerzo no fue fácil y no quiero que mi hazaña lo tape porque todos tienen su familia y tuvieron que organizar comidas, luchar con niños pequeños, desplazarse de Móstoles a la Barranca, de la Barranca a Segovia y a las 23:30 con los niños dormidos vuelta a Móstoles, y además de todo esto cuidar en todo momento de mi Manuela y de mis niños. Además me siento orgulloso porque no solo me cuidaron a mí sino que se preocuparon de cualquier corredor que lo necesito  incluyendo y con mucho cariño al Abuelo.

Pili, Jorge (Coach), Elena, Sergio-Rafa, Nuria, Maria, Alejandra, Rafa Jr.-Javi, Belen, Maria –Coral, Luis, el pequeño Manuel,-Nuria-Mar-Joaquín-Esther, Ángel-Yolanda.

  Además en este grupo también tenía a algunos ilustres de la Blogosfera como Jaime Navarrete y Juan Carlos.

   Y sobre todo y sufriendo como siempre, pasando malos ratos y algo de angustia mi amada Manuela con mis cachorros de la mano para entregármelos a 20m de la meta.

 Gracias es una palabra muy pequeñas y solo se me ocurre repetirla 103 veces por cada kilometro recorrido.

Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias Gracias.